La mezcla mexicana gana 0.58% y recupera la pérdida registrada ayer.
La mezcla mexicana de petróleo cerró la jornada con una ganancia de 0.58% o 0.62 dólares frente al precio de cierre del lunes, al cotizarse en el mercado energético internacional en 108.21 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
La mezcla mexicana de petróleo mantiene un promedio de 94.35 dólares por barril, 39.35 dólares por arriba de lo presupuestado por la Secretaría de Hacienda para 2022.
La mezcla mexicana cerró el mes de marzo con una ganancia de 6.75% en comparación con febrero, mientras que en abril cerró con una ganancia de 4.19% y en mayo acumula una utilidad de 6.07%.
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) subió este miércoles un 0.5% y cerró en 110.05 dólares el barril, después de que la Administración de Información de Energía de Estados Unidos (EIA) anunciara una reducción en los inventarios de petróleo la semana pasada.
El barril de Brent para entrega en julio terminó este miércoles con un aumento del 0.41% en el mercado de futuros de Londres, hasta los 114.03 dólares.
Por su parte, los contratos de futuros de gasolina con vencimiento en julio subieron 2 centavos, hasta 3.83 dólares el galón.
Mientras que los de gas natural para ese mismo mes subieron también un poco menos de un centavo, hasta 8.83 dólares por cada mil pies cúbicos.
El petróleo amaneció al alza tras dos días de movimientos moderados, que han contrastado con la volatilidad de las últimas semanas debido a la guerra de Ucrania, las medidas en China para frenar el nuevo brote del coronavirus y los temores a una recesión económica.
“El repunte del petróleo del primer trimestre ha perdido impulso en las últimas semanas, pero la base de mínimos de marzo se sigue manteniendo hasta ahora y la tendencia a largo plazo (de los precios) sigue siendo alcista”, asegura la firma Sevens Report en un informe.
Según la EIA, los inventarios de crudo en el país se redujeron en un millón de barriles la semana pasada, dado el aumento de la producción de las refinerías ante la llegada de la temporada veraniega, que se vincula con una mayor demanda de gasolina para viajes.
Además, los inventarios de gasolina también se vieron reducidos en 500 mil barriles, aunque los de productos derivados subieron en 1.7 millones.
“La tensión en el mercado de gasolina de EE. UU. generará preocupaciones sobre el suministro a medida que avanzamos en la temporada (de viajes). La falta de flexibilidad en EE. UU. está atrayendo gasolina de otros lugares, incluida Europa, donde la oferta y la demanda también está cada vez más ajustada”, dijo, por su parte, Warren Patterson, jefe de estrategia de materias primas de ING.
