La AMESPAC advierte que la falta de pagos de Pemex compromete la continuidad operativa de proveedores a partir de julio, afectando la seguridad energética nacional.
La Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Petroleros (AMESPAC) lanzó una severa advertencia: si no se resuelve el problema de pagos con Petróleos Mexicanos (Pemex), muchas empresas proveedoras podrían suspender operaciones a partir de julio de 2025.
Según cifras oficiales de Pemex, al primer trimestre de este año, la deuda con proveedores alcanzó los 404 mil millones de pesos, un incremento del 260% respecto a 2018. Además, se reportó un drástico recorte presupuestal del 66% para 2025, pasando de 373 mil millones a solo 127 mil millones de pesos.
AMESPAC señaló que tan solo entre sus afiliados, Pemex mantiene adeudos por más de 50 mil millones de pesos, algunos con antigüedad de hasta 12 meses, debido a obstáculos en el sistema de Codificación de Pagos y Descuentos (COPADE), que impide la facturación de servicios ya certificados.
La baja actividad también es notoria: de los 59 equipos de perforación operativos en 2024, solo 26 trabajaron en el primer trimestre de 2025.
En un desplegado dirigido a la presidenta Claudia Sheinbaum y altos funcionarios del sector energético y financiero, AMESPAC solicitó la instalación urgente de una mesa de trabajo para abordar tres puntos esenciales:
- Reconocer y liberar facturación pendiente de 2024.
- Garantizar pagos regulares en 2025.
- Diseñar un programa para liquidar los adeudos históricos.
La asociación, presidida por Rafael Espino de la Peña, advirtió que esta situación ya impacta seriamente al sector, y su continuidad operativa no está garantizada.
El deterioro en el pago a proveedores compromete no solo la producción de hidrocarburos, sino la seguridad y soberanía energética del país, señalaron.