Pemex redujo su producción 11.3% en 1T25 por declinación de campos, retrasos técnicos, falta de infraestructura y condiciones climáticas adversas.
Durante el primer trimestre de 2025, Petróleos Mexicanos (Pemex) registró una disminución del 11.3% en su producción promedio de hidrocarburos líquidos, alcanzando 1,615 mil barriles diarios (Mbd), cifra que incluye la participación de sus socios. Esta baja se debió principalmente a una combinación de factores operativos, técnicos y climáticos que afectaron el desempeño de la empresa.
Entre las principales causas de esta caída se encuentra la declinación natural de importantes campos marinos como Maloob y Zaap, así como de los campos terrestres Quesqui y Tupilco Profundo. Además, problemas técnicos en la perforación y terminación de pozos complejos, con altos niveles de profundidad, presión y temperatura, generaron atrasos significativos en la incorporación de nuevos volúmenes de producción.
Otros factores incluyeron menores cuotas iniciales de producción en pozos del campo Xanab y la conclusión de la vida útil de los sistemas de bombeo electrocentrífugo en el campo Ayatsil. Asimismo, Pemex enfrentó un desfase en la instalación de infraestructura crítica, como la planta de reducción de contrapresión en Quesqui y plataformas marinas en Xanab.
La suspensión de servicios esenciales, como el suministro de gas para el bombeo neumático en Yaxché, y condiciones climatológicas atípicas en zonas costa afuera, también interrumpieron la operación regular, agravando aún más la baja en producción.
Aunque se realizaron múltiples intervenciones para estabilizar los niveles de extracción —incluyendo 353 reparaciones menores, 151 estimulaciones, 28 reparaciones mayores y 17 terminaciones—, los resultados fueron insuficientes para frenar la tendencia a la baja.