Pemex y Grupo Slim negocian un contrato mixto para el desarrollo del campo Ixachi, mientras el magnate gana presencia en la industria petrolera mexicana.
Pemex está en conversaciones con empresas del Grupo Carso, propiedad de Carlos Slim, para establecer un contrato mixto en Ixachi, el mayor descubrimiento de gas natural en México en más de 25 años. La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó la negociación, destacando que la participación de empresas de Slim en Ixachi ya existía previamente a través de la perforación de pozos.
Los contratos mixtos son una nueva figura de asociación entre Pemex y empresas privadas, establecida bajo la reciente reforma energética. Esta estrategia busca fortalecer a las empresas estatales, Pemex y CFE, al mismo tiempo que permite la inversión privada en el sector energético.
El acuerdo con Slim permitiría a Pemex avanzar en la explotación de Ixachi sin comprometer su ya limitada capacidad financiera. Además, el empresario también está involucrado en las negociaciones de Zama, un yacimiento petrolero en el Golfo de México. Se espera que Grupo Carso aporte capital en Zama a cambio de una mayor participación en la operación conjunta del proyecto.
Dada la meta de producción de 1.8 millones de barriles diarios establecida por Sheinbaum, la falta de recursos en Pemex ha impulsado la necesidad de este tipo de asociaciones estratégicas. Slim, quien ya domina sectores como telecomunicaciones, banca e infraestructura, está consolidando su influencia en la industria petrolera con estas inversiones.
Con estas alianzas, Pemex busca equilibrar el control estatal con la inversión privada para impulsar la producción energética en México.