En el arranque del sexenio de Sheinbaum, 98% de los ingresos petroleros fueron transferidos a Pemex, dejando escasa aportación fiscal neta al gobierno.
Durante los primeros cuatro meses de 2025, el 98% de los ingresos petroleros del gobierno federal se destinaron a rescatar financieramente a Petróleos Mexicanos (Pemex), según reveló un análisis de México Evalúa. Este patrón ha generado que la renta petrolera prácticamente no contribuya a las finanzas públicas, en lo que marca el inicio del sexenio de Claudia Sheinbaum.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), los ingresos petroleros del gobierno federal entre enero y abril sumaron 90,600 millones de pesos, lo que implica una recuperación del 44% en términos reales respecto al mismo periodo de 2024. Sin embargo, durante ese mismo lapso, el gobierno transfirió 88,400 millones de pesos a Pemex, dejando apenas 2,200 millones como ingreso neto, el segundo peor registro desde que se tiene información comparable.
En paralelo, Pemex retuvo 224,662 millones de pesos, es decir, el 71% de toda la renta petrolera nacional generada en ese periodo, lo que refleja una concentración inédita de recursos en la petrolera estatal.
El investigador Jorge Cano explicó que, al ser Pemex una empresa pública, la renta petrolera se divide en dos partes: una fracción va al gobierno vía pagos de derechos, y otra permanece en la empresa. Sin embargo, la proporción que Pemex transfiere al gobierno ha venido cayendo desde sexenios anteriores, pasando de un promedio de 33% con Felipe Calderón, a 42% con Peña Nieto, y hasta 66% con López Obrador.
Ahora, con el 98% absorbido por Pemex, la situación evidencia la creciente dependencia fiscal de la petrolera, y limita el impacto de los ingresos petroleros en políticas públicas, infraestructura y programas sociales, lo que representa un desafío estructural para la sostenibilidad fiscal del país.