Carlos Orozco, director comercial de Misumi México, explica cómo esta empresa japonesa impulsa la industria nacional a través de automatización, personalización de componentes, digitalización y colaboración con universidades, gobierno e industria. Todo con una misión clara: hacer más eficiente el tiempo.
En un entorno donde la eficiencia, la digitalización y la innovación son clave para el crecimiento industrial, empresas como Misumi México están marcando la diferencia. En entrevista en Panorama Industrial de Industry & Energy Magazine, Carlos Orozco, director comercial de la firma japonesa en nuestro país, compartió los pilares que sostienen su modelo de negocio y la forma en que están revolucionando procesos industriales desde Querétaro para toda la república.
Una empresa global con raíces japonesas
Misumi fue fundada en 1969 en Japón y desde entonces ha expandido su presencia en todo el mundo. La subsidiaria en México inició operaciones en abril de 2018, convirtiéndose en una pieza estratégica para atender al mercado latinoamericano. “Desde antes de tener presencia en el país, muchos clientes mexicanos ya nos compraban desde Estados Unidos”, explica Orozco. “El reto fue transferir esa confianza a Misumi México y crecer localmente”.
Hoy, la empresa cuenta con un amplio equipo comercial distribuido por todo el país y un centro logístico en Querétaro con más de 800 mil piezas en stock. “Ofrecemos tiempos de entrega de uno o dos días en productos nacionales y de 10 a 15 días en importaciones desde Japón”, asegura el directivo.
Con más de 20 millones de componentes disponibles y la capacidad de generar 80 sextillones de configuraciones distintas, Misumi se presenta como un “one-stop shop” para las industrias que requieren componentes de automatización, moldes de inyección o partes para prensas y estampados.
Sin embargo, lo que verdaderamente distingue a Misumi no es solo la variedad, sino la configurabilidad de sus productos. A través de una intuitiva plataforma de comercio electrónico, los clientes pueden personalizar piezas específicas para ajustarlas a sus necesidades exactas. Esto se traduce en ahorros de tiempo del 30% al 35% en procesos industriales. “Nuestro lema es claro: Tu tiempo, nuestra prioridad”, recalca Orozco.
Además, Misumi ofrece modelos 3D digitales de todos sus componentes, lo que permite a los ingenieros simular procesos, diseñar prototipos y anticipar escenarios en proyectos industriales complejos. “Eso es clave para eficientar tiempos y reducir errores antes de pasar a la producción”, comenta.
Calidad y cumplimiento: una fórmula ganadora
En la industria, la calidad no es negociable. En este rubro, Misumi presume un índice de reclamos de calidad de solo 2 por cada millón de piezas producidas y una tasa de entrega puntual del 98.5%. Estos estándares son parte del ADN japonés de la compañía, pero también resultado del compromiso del equipo local. “Detrás de la tecnología hay personas. Y el recurso humano de Misumi México es nuestro motor”, enfatiza Orozco.
Carlos Orozco destaca el papel que juega la digitalización en el nuevo paradigma de la industria, no solo como una herramienta para mejorar procesos, sino como un camino hacia la mentefactura, concepto que describe una producción basada en inteligencia y no solo en operación. “Las industrias hoy necesitan datos, modelado, anticipación. Y nosotros aportamos herramientas para que eso sea posible”, añade.
Con presencia en sectores como automotriz, farmacéutico, médico y electrónico, Misumi trabaja de la mano con empresas que diseñan maquinaria, crean prototipos o desarrollan procesos automatizados, aportando precisión, flexibilidad y eficiencia.
Una empresa que apuesta por el desarrollo económico de México
Además del crecimiento interno, Misumi ha buscado integrarse al ecosistema industrial mexicano desde una perspectiva de colaboración entre industria, gobierno y academia. La compañía mantiene vínculos con universidades como la UNAM y el IPN, así como con gobiernos estatales, como el de Querétaro, donde participa en proyectos de innovación y profesionalización de jóvenes.
“Estamos convencidos de que México tiene un gran potencial industrial. Nuestra filosofía es japonesa, pero aquí hemos sabido tropicalizar nuestra operación para sacar lo mejor del talento nacional”, comenta Orozco. “La disciplina japonesa combinada con la creatividad y el empuje mexicano es una fórmula poderosa”.
Al cierre de la entrevista, el director comercial lanzó un mensaje directo a los líderes del sector industrial: “Misumi México está aquí para colaborar. Visiten nuestro portal, conozcan nuestras soluciones y descubran cómo podemos ser aliados estratégicos en la evolución de sus procesos. Estamos comprometidos con el futuro industrial de México”.
Con un enfoque centrado en la eficiencia, la innovación y la colaboración, Misumi México se consolida como un jugador clave en la transformación industrial del país, apostando por una visión moderna donde el tiempo del cliente es la prioridad y la digitalización es el puente hacia un crecimiento sostenible.