Pemex busca reactivar 400 pozos cerrados con inversión privada. El objetivo: sumar 13 mil barriles diarios y reducir la brecha de producción nacional.
Petróleos Mexicanos (Pemex) ha iniciado un nuevo proceso de licitación para la reactivación de 400 pozos petroleros cerrados, con el objetivo de elevar su producción de crudo en hasta 13 mil barriles diarios hacia diciembre de 2025. Esta estrategia, con una inversión estimada en 1,500 millones de pesos, se realizará con participación de empresas privadas mediante contratos de servicio.
El modelo de negocio propuesto por Pemex establece que los particulares asumirán toda la inversión, la ingeniería, operación y mantenimiento de los pozos. A cambio, su única forma de remuneración será una tarifa basada en el flujo de efectivo disponible, una vez comercializado el crudo. Es decir, sólo cobrarán si hay resultados.
Este enfoque permite que Pemex se mantenga como operador de las asignaciones petroleras, sin comprometer su presupuesto. La iniciativa está alineada con la meta gubernamental de alcanzar una producción diaria de 1.8 millones de barriles, frente a los actuales 1.6 millones, que incluyen crudo y condensados.
Actualmente, el proceso se encuentra en la fase de revisión técnica de pozos y la conformación de cuartos de datos. A nivel nacional, existen alrededor de 5,000 pozos cerrados con potencial de negocio, pero la meta inicial es reactivar los más rentables en el corto plazo.
La medida busca reforzar la rentabilidad de las asignaciones de Pemex, al tiempo que contribuye a la seguridad energética del país. Sin embargo, refleja también la presión sobre la petrolera para cumplir sus metas de producción, afectadas por la caída de plataformas maduras, limitaciones presupuestales y la disminución de exportaciones de crudo.