En 2015, la compañía Worldwide Energy Investment presentó una demanda por daños económicos tras la terminación anticipada de un convenio entre Ecopetrol y la Universidad Industrial de Santander (UIS) en el que la firma internacional actuaba como aliado estratégico
Después de 10 años de lucha jurídica, el gobierno de Colombia anunció ante el Consejo de Estado el triunfo de Ecopetrol por una demanda de 210 millones de dólares presentada por la compañía Worldwide Energy Investment Ltd. (WEI) por supuestos perjuicios en la cancelación anticipada de un convenio.
Recordemos que este caso empezó en 2015 cuando WEI presentó una demanda por daños económicos tras la terminación anticipada de un convenio entre Ecopetrol y la Universidad Industrial de Santander (UIS) para desarrollar el proyecto Campo Escuela Colorado, que tenía el objetivo la colaboración empresarial, científica y tecnológica, y en el que la firma internacional actuaba como aliado estratégico del claustro universitario.
WEI argumentó que las decisiones de Ecopetrol le causaron perjuicios económicos y demando a la petrolera colombiana al considerar que tenía una responsabilidad extracontractual, debido que las decisiones adoptadas por la empresa estatal le habían generado un daño antijurídico.
Sin embargo, el equipo de abogados de la Agencia Nacional de Defensa Jurídica del Estado (ANDJE) intervino en el proceso y demostró que no existió ningún vínculo jurídico entre Ecopetrol y la empresa demandante, pues jamás hubo una relación contractual con los demandantes, quienes pactaron exclusivamente con la UIS.
En los alegatos la Agencia demostró que la terminación del convenio se realizó conforme a lo acordado con la universidad, sin que Ecopetrol incurriera en actuaciones que generaran responsabilidad patrimonial.
El caso fue conocido en primera instancia por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca que negó las pretensiones de la demanda en agosto de 2023. Esa decisión inicial fue confirmada en su totalidad por el Consejo de Estado.
El alto tribunal concluyó que no existió actuación de mala fe por parte de Ecopetrol ni expropiación de las inversiones de WEI. Con esta decisión, se cerró el litigio.