La reducción fiscal aplicada a Pemex por el gobierno de AMLO costará a Hacienda más de 723 mil millones de pesos este año, según cálculos de expertos.
Durante la administración de Andrés Manuel López Obrador, Pemex ha experimentado una importante reducción en su carga fiscal, lo que ha tenido un impacto significativo en las finanzas públicas.
Según César Rivera de Jesús, investigador en transición energética y medio ambiente del CIEP, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público dejará de percibir 723 mil millones de pesos en 2024 debido a la reducción del Derecho de Utilidad Compartida (DUC).
El DUC, que comenzó el sexenio con una tasa del 65%, fue reducido a un 35% al cierre de la administración, lo que ha permitido a Pemex reducir su deuda, que en el segundo trimestre de 2024 se ubicó en 99,391 millones de dólares, una baja desde los 105 mil millones al inicio del sexenio.
Esta disminución fiscal ha sido clave para aliviar los problemas financieros a corto plazo de la petrolera, complementada por transferencias desde Hacienda que, a lo largo del sexenio, sumaron un billón de pesos, de los cuales 65% se destinó al pago de la deuda.
No obstante, este alivio a corto plazo no resuelve los desafíos financieros a largo plazo. El mercado espera señales claras sobre la estrategia que la nueva administración, liderada por la secretaria de Economía Luz Elena González y el director de Pemex Víctor Rodríguez, adoptará para mejorar la sostenibilidad financiera de la petrolera. Una de las expectativas es que se fijen en la ley los ajustes al DUC, ya que actualmente no son permanentes.
Según Moody’s, Pemex necesitará un flujo de efectivo de 20 mil millones de dólares para 2026, lo que plantea nuevos desafíos para la petrolera y su relación con las finanzas públicas.
