La OPEP mantiene una visión optimista sobre el crecimiento de la demanda petrolera en 2022 y 2023.
La OPEP mantuvo el martes sus previsiones de un fuerte crecimiento de la demanda mundial de petróleo en 2022 y 2023, aludiendo a los indicios de que las principales economías se están comportando mejor de lo previsto, a pesar de vientos en contra como la aceleración de la inflación.
La demanda de petróleo aumentará en 3,1 millones de barriles por día (bpd) en 2022 y en 2.7 millones de bpd en 2023, sin cambios respecto al mes pasado, dijo la Organización de Países Exportadores de Petróleo en un informe mensual.
El uso del crudo ha repuntado desde los mínimos pandémicos, aunque los altos precios y los brotes de coronavirus en China han recortado las previsiones de crecimiento para 2022.
La OPEP cree ahora que el uso del petróleo superará en 2023 la tasa de 2019, tras haber dicho este año que esperaba que esto ocurriera en 2022.
“Se espera que la demanda petrolera en 2023 se vea respaldada por unos resultados económicos todavía sólidos en los principales países consumidores, así como por las posibles mejoras en las restricciones del COVID-19 y la reducción de las incertidumbres geopolíticas”, dijo la OPEP en el informe.
La OPEP y una alianza liderada por Rusia, un grupo conocido de forma colectiva como OPEP+, incrementaron este año el bombeo con el fin de eliminar los recortes récord aplicados en 2020 después de que la pandemia redujera la demanda.
Sin embargo, en los últimos meses la OPEP+ no logró elevar su producción debido a la escasa inversión en yacimientos petrolíferos por parte de algunos miembros de la OPEP y a las pérdidas en el bombeo ruso.
El informe mensual de la OPEP mostró que la producción de la OPEP aumentó de manera considerable en agosto, en 618.000 bpd, hasta los 29,65 millones de bpd, aunque gran parte se debió a que el suministro libio se recuperó tras las interrupciones.
(Editado en español por Carlos Serrano)
