Wintershall Dea se despide de los activos brasileños en un intento por optimizar su cartera de exploración y producción.
La petrolera alemana Wintershall Dea informó de los planes para salir de las actividades en Brasil, buscando optimizar su cartera y concentrarse en encabezar la transformación de la producción de gas natural mientras persigue sus objetivos de cero emisiones.
Wintershall Dea informó que ha decidido terminar todas sus operaciones en Brasil y cerrar la oficina actual en Río de Janeiro luego de la ejecución de todas las medidas requeridas de acuerdo con todas las normas contractuales y legales.
Thilo Wieland, miembro de la Junta de Wintershall Dea, responsable de las regiones de Rusia, América Latina y Transporte, comentó: “Esta decisión es el resultado de un análisis muy completo de nuestra cartera global y la evaluación de proyectos individuales y cómo encajan con nuestro largo estrategia a largo plazo”.
La compañía explicó que el foco de su producción global está en el gas natural, que actualmente representa alrededor del 70% de su cartera. Sin embargo, Wintershall Dea también continuará produciendo petróleo, centrándose en regiones y proyectos seleccionados que estén en línea con sus objetivos climáticos.
La firma tiene participaciones en un total de nueve licencias de exploración en Brasil y es operadora de cuatro de ellas. La compañía es operadora de una licencia en la cuenca de Ceará y tres en la cuenca de Potiguar, ambas frente a la costa norte del país y tiene participaciones en cinco campos en las cuencas de Campos y Santos, frente a la costa sureste.
Para recordar, la compañía obtuvo siete licencias de exploración en 2018 y dos bloques costa afuera adicionales junto con sus socios Repsol y Chevron en octubre de 2019. Ese mismo año, Wintershall Dea acordó con Murphy Oil una sociedad en sus tres bloques de exploración costa afuera Potiguar, lo que le permitió Wintershall Dea para permanecer como operador con una participación del 70%.
“Apreciamos mucho las buenas relaciones que hemos construido a lo largo de los años con nuestros socios comerciales y las autoridades de Brasil y trabajaremos constructivamente con ellos para garantizar una transición sin problemas”, concluyó Wieland.
Wintershall Dea no tiene compromisos mínimos de trabajo remanentes en las licencias u otras obligaciones financieras importantes, según lo dispuesto en los respectivos contratos de concesión.
En línea con sus objetivos de impulsar iniciativas de transformación del gas como combustible del futuro, satisfaciendo los objetivos de la transición energética para la reducción de emisiones, la compañía también afirmó el lunes que tiene la intención de dar vida a la transformación de la industria del gas con la captura y almacenamiento de hidrógeno y carbono. (CCS) para lograr sus objetivos climáticos en Europa.
Wintershall Dea considera que estas tecnologías son cruciales para reducir las emisiones y cree, como acertadamente expresó su CEO, que “la transición energética solo tendrá éxito si no dejamos de lado ninguna tecnología que pueda reducir las emisiones”.
La compañía quiere alcanzar cero neto en toda su cartera upstream, tanto operada como no operada, para 2030, incluidas las emisiones de gases de efecto invernadero de Alcance 1 (directas) y Alcance 2 (indirectas) sobre una base de participación accionaria.
Además, Wintershall Dea tiene la intención de reducir la intensidad de las emisiones de metano por debajo del 0,1 % para 2025 y mantener cero la quema rutinaria de gas asociado en sus operaciones, logrando sus objetivos climáticos a través de la optimización de la cartera, más eficiencia energética, inversiones en soluciones de compensación basadas en la naturaleza y en tecnologías futuras como el hidrógeno y CCS.
